viernes, 26 de febrero de 2010


¡Cuidado! el FBI vigila el internet

extraido de Muladar News
25 de febrero de 2010

Microsoft atendiendo a poderosos intereses logró por fin cerrar Cryptome, una web dedicada a la publicación de documentos confidenciales y secretos desde el 1996. Se sabe que dicha web publicado fotos de soldados torturados en Iraq, identidades de agentes secretos, mapas de instalaciones militares, documentos sobre criptografía, y ha sido un referente periodístico por la defensa de la libertad de expresión desde 1996.


Pero el agua que rebalso el vaso fue cuando Cryptome publicó en PDF un documento en el que se describia cómo Microsoft almacena datos privados de usuarios mediante IP y eran cedidos a las agencias de seguridad.

Microsoft envia una notificación por derecho de autor contra el titular de Cryptome, John Young, el martes después de que esta web publicara dicho documento de Microsoft sobre la entrega de datos a agentes del FBI que buscan información sobre los usuarios de Microsoft.

Cryptome fue cerrado por su proveedor hosting Network Solutions y su nombre de dominio bloqueado el miércoles . El documento de 22 páginas que publicó Cryptome no contiene secretos comerciales, pero Microsoft revela cómo se produce la vigilancia de sus usuarios.

Otro particular es el Xbox Live y su registro IP que se utiliza para acceder a sus servicios y las almacena para perpetuidad.

Ultima Hora:
8:00 pm Microsoft ha retirado su demanda y Cryptome vuelve a estar disponible. Dejando un mensaje de advertencia de que las webs están siendo vigiladas.

“Internet es estratégica para los políticos”


Rahaf Harfoush, responsable de comunicación en nuevas tecnologías de Obama, asegura que la Red resultó clave para la victoria.


EUROPA PRESS - Madrid
18 de julio de 2009
Blog Muladar News

Más de mil millones de correos electrónicos enviados a los ciudadanos durante la campaña para las elecciones presidenciales fueron una de las claves para la victoria del actual dirigente de los Estados Unidos, Barack Obama, según desveló su responsable de comunicación en nuevas tecnologías a lo largo de este periodo, Rahaf Harfoush.

Durante su intervención en los debates abiertos de Fundación Telefónica celebrados en Madrid, Harfoush defendió el empleo de las herramientas en la Red en el ámbito político y de las grandes compañías, si bien recordó que “no tiene sentido” su uso si no existe “un claro sentido estratégico”.

En el caso de la campaña de Obama, el número de ‘mails’ enviados a futuros votantes fue posible gracias a la colaboración de voluntarios, que facilitaron estas direcciones. La cifra total de direcciones recopiladas durante la campaña electoral ascendió a 13 millones.

Para evitar posibles problemas con la privacidad de estos ciudadanos, Harfoush recalcó que el grupo de comunicación del presidente fue “muy estricto” a la hora de eliminar de la base de datos a aquellas personas que se mostraron disconformes con el envío de estos mensajes.

“Mucho más” que Facebook y Twitter

A lo largo de su conferencia, incidió en la importancia de acompañar el uso de las nuevas tecnologías con una “inteligente” campaña. “El trabajo detrás de la comunicación de Obama fue mucho más que Facebook y Twitter, aunque muchas personas sólo se interesen por esas redes sociales”.

Así, recordó que la campaña de Obama consiguió recaudar a través de “pequeñas” donaciones personales –muchas de ellas de 50 dólares– cerca de 700 millones de dólares, casi el doble que su rival, John McCain. En concreto, en el mes de septiembre –dos meses antes de las elecciones– recaudaron 150 millones de dólares, de los cuales un 57% se obtuvo a través de medios ‘on-line’.

Mediante la presentación de cifras, Harfoush puso de relieve el trabajo desarrollado por el grupo de comunicación de Obama a través de las redes sociales. Frente a los 620.000 ‘amigos’ de McCain en Facebook, Obama presentaba más de 3,2 millones; mientras el representante republicano alcanzó la cifra de 218.000 ‘amigos en ‘Myspace’, el actual presidente de Estados Unidos registraba un millón de personas.

Mayor responsabilidad

No obstante, resaltó la necesidad de implantar estas estrategias de manera “paulatina”, ante el riesgo de “sobrecargar” los canales de información. “A veces, algunas personas nos piden emplear todas estas redes sociales a la vez, sin conocer el uso de ninguna de ellas”, apuntó. Además, afirmó que la participación activa de los ciudadanos también conlleva una mayor responsabilidad y atención a sus peticiones.

Por último, Harsoufh reflexionó sobre los límites de las nuevas tecnologías y los problemas de ‘boicots’ de los rivales. “Si uno está presente de manera continua en los espacios de la Red, puede controlar cualquier situación imprevista”, concluyó.

martes, 23 de febrero de 2010


El ágora digital


El País
23 de feberero de 2010
Internet es una nueva plaza pública que, como tal, requiere una organización que permita un tráfico regulado. No debería convertirse en un universo caótico y acrítico. La figura del editor es clave

ANDREU JAUME

La paulatina implantación en España del libro digital ha empezado a suscitar en el gremio entusiasmos y detracciones de diversa índole, indignados unos por la marginación de la imprenta, angustiados otros por cuestiones relativas a los derechos de autor y encantados algunos con lo que consideran, gracias a la alquimia cibernética, la imparable universalización de la cultura. Sin ánimo de menoscabar ninguno de estos asuntos, todos ellos de incontestable trascendencia, quizá valga la pena llamar la atención sobre otras cuestiones que sobrevuelan, de un modo menos aparente, el actual panorama literario, y cuya cabal apreciación tal vez ayude a nutrir el debate en torno a esas preocupaciones.

Se pretende condenar a los escritores a vender sus obras a gritos en un mercado atestado

En la Red y en televisión una idea romántica del 'pueblo', la 'participación', sustituye a los que saben

No hay duda de que nos encontramos en una encrucijada cuyos caminos dibujan brumosas fugas. El ruido y la confusión de estos días recuerdan de algún modo a la algarabía del siglo XIX, cuando la consolidación de la burguesía trajo consigo la apoteosis de la novela, la incorporación a la lectura de las nuevas masas urbanas, la eclosión del periodismo y, en definitiva, la arquitectura de una nueva concepción democrática de la cultura que desembocaría, ya en el crepúsculo de esa época, en una reacción y en una crisis que duraría hasta bien entrado el novecientos. Ahora, como entonces, vivimos una profunda transformación de los medios de difusión literaria cuyo alcance todavía no vislumbramos pero que deberíamos empezar a juzgar con mayor cautela y espíritu crítico.

Por encima de todo, Internet es una nueva plaza pública que, como tal, requiere una jerarquía y una organización que permitan un tráfico regulado. El entusiasmo desmedido por la tecnología ha llevado incluso a algunos a proclamar eufóricos, por ejemplo, la desaparición de los editores en el nuevo régimen virtual, partidarios de una red libre donde los autores serían empresarios y publicistas de sí mismos, aliados fraternalmente con sus lectores. En la práctica, esta propuesta supone condenar a los escritores a la autoedición en un mercado atestado de creadores que, sin orden ni concierto, se desgañitan por vender sus obras a cuatro amigos que al final, hartos de tanta payasada, acabarán leyendo Anna Karenina.

Además de muchas otras misiones peregrinas, un editor cumple una evidente función social, inspirada en el criterio con que construye su catálogo y orientada a mediar entre el autor y su público ideal; una labor que, en última instancia, ayuda a configurar ese espacio común: el ágora de la polis. Para culminar su trabajo satisfactoriamente, el editor necesita otra figura que últimamente parece condenada al ostracismo: el crítico. Sin crítica no hay literatura porque simplemente no hay lectura eficaz. Si el editor, para entendernos, representa al autor, el crítico se erige como abogado del público, aunque muchas veces impugne o condene su gusto. La responsabilidad del editor estriba también en exigir una crítica combativa y valiente, capaz, sí, de desautorizar sus elecciones y entablar así la contienda sin la cual una cultura no puede aspirar a elevarse y perpetuarse. Tan importante como la libertad de expresión es la necesidad de juicio, que es una cuestión moral. Internet no debería convertirse en un reino acrítico donde todo tenga el mismo valor. En Estados Unidos, por ejemplo, la crítica literaria está desapareciendo de los grandes periódicos para refugiarse en una infinidad de blogs que proliferan en el caos digital, dirigidos a grupos de lectores cada vez más reducidos y vecinales, un proceso que paradójicamente convierte la pretendida universalidad del invento en una inesperada regresión provinciana: la hoja parroquial.

La edición de poesía, por poner un caso concreto, se ha resentido claramente de la deserción crítica. El lector, ante la ausencia de una lectura pública y consistente de tal o cual poeta joven, se ve obligado a recurrir a la enésima edición de Auden, Eliot o Lorca con la que el editor llena su programa tras haber comprobado la inutilidad de publicar esos otros poemarios desconocidos que vuelven intactos de la librería al almacén sin que nadie les haya dado voz.

La debilidad de la crítica está relacionada, por otro lado, con la deslegitimación del principio de autoridad, usurpado por una democratización de la opinión que en realidad supone una perversión y aun una degradación de la idea de democracia. Basta ver la general banalidad de la participación de los lectores en la prensa digital y la intoxicación que a su vez produce en la calidad de la información. El síndrome se ha extendido incluso fuera de la Red. Todo el mundo parece estar encantado de que la televisión haya ideado un programa como Tengo una pregunta para usted, donde una selección de ciudadanos -la idea romántica de pueblo- sustituye al periodista o al politólogo a la hora de interpelar al presidente del gobierno o al líder de la oposición, con el inevitable empobrecimiento de la dialéctica entre el poder y la opinión pública, uno de los principales puntos de articulación de una verdadera democracia.

La crisis que tuvo lugar a finales del XIX y que apuntábamos al principio se gestó en un escenario parecido. El máximo representante entonces de la defensa aristocratizante de las letras frente a su secularización demótica fue, inevitablemente, Mallarmé, que cifró su poesía en las sentinas del lenguaje para ahuyentar a los lectores de periódicos y novelas. El eco del hermético resonó a lo largo de la primera mitad del siglo XX y perdura todavía en un escritor como Nabokov, cuya aversión hacia Freud implica, entre otras cosas que ahora no vienen al caso, un rechazo de la colectivización de la creatividad -el psicoanálisis y la interpretación de los sueños supusieron para algunos el reconocimiento de la universalización de la capacidad creativa-, intolerable para un escritor que se había educado todavía en el principio de la alta cultura y en el desprecio más absoluto hacia el filisteísmo.

Ahora, a principios del siglo XXI, afrontamos un fenómeno similar, aunque de diagnóstico más problemático. Internet podría verse como un nuevo inconsciente gracias al cual uno puede ser transitoriamente culto, artista, editor o periodista. No se trata ahora de oponer un elitismo pueril, sino de reclamar un mínimo de atención hacia ciertas inercias que están tomando carta de naturaleza. La Red permite sin duda la ampliación del derecho fundamental a la información y la cultura, pero pone de manifiesto también el problema cada vez más ominoso de la educación. El crítico inglés James Wood ha dicho con mucha gracia que Internet es como una fiesta a la que uno llega cuando todo el mundo está ya muy borracho. Y ya se sabe que para estar a la altura hay que beber muy rápido y perder la conciencia cuanto antes. Como lector agradezco todavía, en este sentido, que haya quien tenga la autoridad suficiente para hacer callar e incluso para echar al más pesado de la fiesta.

T. S. Eliot, uno de los pocos que pudo ser autor, editor y crítico al mismo tiempo, respondió una vez a un indignado escritor al que le había rechazado un manuscrito con la siguiente declaración de intenciones: "Me pagan para evitar que se publiquen tantos libros como sea posible". I am nothing if not critical ("No soy nada si no soy crítico"): las palabras de Yago parecen siempre resonar tras la voz del impertinente poeta.

Sin una respuesta crítica, tanto el autor como el editor acaban trabajando exclusivamente para el mercado, un camino que inevitablemente conduce al totalitarismo intelectual, gobernado por una sola idea y donde nadie exige nunca nada a nadie. La llegada del libro digital quizá sea una buena oportunidad para proponer una reflexión en profundidad en torno al oficio de escritores, editores y críticos -más allá de cuestiones técnicas o legislativas-, sin olvidar la idea del ágora, cuya preservación como espacio indispensable para la creación y transmisión del conocimiento quizá sea el principal reto de nuestra generación.

Andreu Jaume es editor de Lumen.

domingo, 21 de febrero de 2010


iPad, ¿el eslabón perdido?


APPLE PRESENTÓ SU NUEVA COMPUTADORA EN MEDIO DE GRAN EXPECTATIVA


El Comercio

La nueva creación de Steve Jobs —una mezcla de celular y laptop— fue mostrada ayer. ¿Repetirá Apple el éxito que tuvo con el iPhone?

Jueves 28 de Enero del 2010

Era un secreto a voces del que se sabía mucho y a la vez poco. Que costaría hasta US$1.000, que se llamaría iSlate, etc. Lo cierto es que, por fin, ayer se develó el misterio y Apple presentó en sociedad a su nueva computadora tipo tablero. Su nombre es iPad y, aunque no es muy original, es la apuesta de la compañía de Steve Jobs para repetir el éxito del iPhone hace tres años.

LAS NOVEDADES

Y fue el mismo Jobs, muy delgado y vestido como siempre con jeans y un suéter negro de cuello alto, el encargado de presentar las funciones del aparato en una conferencia de prensa realizada en San Francisco.

“[El iPad] es mucho más íntimo que una portátil y mucho más capaz que un teléfono inteligente. Es el eslabón perdido [entre estos dos aparatos]”, afirmó Jobs.

A simple vista, por el diseño, parece un iPhone más grande. Tiene una pantalla LED táctil —con tecnología multitouch— de 9,7 pulgadas, un solo botón, 1,3 cm de grosor y un peso de 680 g.

Su procesador es un A4 de 1 GHz, fabricado por la misma Apple. No se dieron datos sobre la memoria RAM, pero se sabe que —así como sucede con otros productos de la empresa— el iPad vendrá en versiones de 16 GB, 32 GB y 64 GB de capacidad de almacenamiento.

Afirman que su batería ofrece una autonomía de hasta 10 horas.

Además de entrar de lleno al mercado de las netbooks (o minilaptops), Apple competirá de manera directa con Amazon en el sector de los lectores de e-books o libros electrónicos. En la conferencia aprovechó para lanzar el iBooks, una tienda virtual de libros electrónicos para comprarlos, descargarlos y leerlos con el iPad.

Otra novedad es que todas las aplicaciones que actualmente funcionan con el iPhone serán compatibles con la nueva tableta y el usuario que ya descargó alguna no tendrá que pagar nuevamente por ellas.

Se anunció que el aparato se venderá sin necesidad de firmar un contrato y que, en Estados Unidos, la empresa AT&T se encargará de ofrecer los planes de conexión a Internet.

Los precios del equipo variarán según las características del mismo: el de 16 GB costará US$499; el de 32 GB, US$599 y el de 64 GB, US$699. Todos los modelos tienen la tecnología inalámbrica Wi Fi y Bluetooth. Sin embargo, quienes quieran contar también con la conectividad 3G deberán pagar 130 dólares más por el equipo.

EN CONTRA

Aunque fue presentado como el dispositivo que mejorará la experiencia de navegación en la web, cuenta con algunas limitaciones que pueden cambiar esta percepción en el usuario.

Tiene una buena velocidad de CPU, pero no es multitarea, es decir, no puede tener varios programas o aplicaciones abiertos al mismo tiempo. Además, tampoco tiene cámara, no permite el envío de mensajes de texto (SMS) y no soporta Flash para la reproducción de animaciones o videos (para usar You Tube se debe descargar una aplicación especial).

¿LLEGARÁ PRONTO?

Jobs anunció que la versión regular (con conexión Wi Fi) estará disponible en marzo y la que cuenta con 3G recién en abril.

Aún no se han dado fechas de venta en otros países, pero si se repite lo que sucedió con el iPhone 3G, el iPad podría llegar al Perú en la segunda mitad del año.


iPad, el eslabón perdido de Apple. Adios PC


Del Blog Os Cuento
28 Enero 2010
Vía
Applesfera.

Tras años de rumores, Apple ha presentado finalmente su largamente esperado iPad, un tablet que pretende llenar el hueco existente entre el iPhone y los MacBook a través de una versión hiperdesarrollada del primero que combina lo mejor de ambos diseños: el frontal multitáctil del iPhone con la parte trasera de aluminio de los MacBook.

En lo que a especificaciones técnicas se refiere, el iPad se apoya en un procesador de 1 GHz de velocidad desarrollado por la propia Apple al que han denominado A4 y que ofrece toda la potencia necesaria para ejecutar este iPhone OS con esteroides de forma suave y fluida en una pantalla LED de 9.7 pulgadas de 1024×768 píxeles de resolución (la pantalla utiliza tecnología IPS para ofrecer un mayor ángulo de visión y tiene 132 píxeles por pulgadas). Disponible en capacidades que van desde los 16 a los 64 GB, el iPad cuenta con acelerómetro, brújula, GPS, altavoz, micrófono y conectividad inalámbrica WiFi 802.11n y Bluetooth 2.1+EDR que se amplia con un segundo modelo a la opción 3G.

Físicamente el iPad es realmente delgado. Tan solo 1,32 cm de grosor en el punto máximo (sus bordes son redondeados para que podamos sujetarlo de un modo más cómodo) y un tamaño de 24,28 × 17,87 cm. El peso tampoco es un problema, 680 gramos para la versión estándar y 730 para el modelo con conectividad 3G.

“El iPad cuenta con nuestra más avanzada tecnología en un dispositivo mágico y revolucionario a un precio increíble. iPad crea y define una categoría completamente nueva de dispositivos que conecta a los usuarios con sus aplicaciones y contenidos de una forma mucho más íntima, intuitiva y divertida que hasta la fecha.” – Steve Jobs

La autonomía, uno de los caballos de batalla de los detractores del iPhone, ha sido una de las sorpresas de la tarde y si en otros aspectos el iPad puede haber dejado cierto regusto amargo (sin señales de multitarea o cámara entre otros), este no ha sido uno de ellos. Ni más ni menos que 10 horas navegando por Internet, viendo vídeos o escuchando música y casi un mes en reposo.

Sistema operativo y Aplicaciones

¿Mac OS X o iPhone OS? ¿Qué tal una mezcla de ambos? (más próxima al último que al primero) El iPad OS (nombre NO oficial) viene a ser una versión del sistema operativo del iPhone solo que adaptada al nuevo tamaño de pantalla. Así, en general encontramos pocos cambios estéticos a excepción de un Dock calcado del de Mac OS X y la posibilidad de utilizar fondos personalizados. Este nuevo sabor del iPhone OS puede ejecutar la mayoría de aplicaciones del teléfono de Apple en su resolución original o ampliarlas para visualizarlas a pantalla completa si sus respectivos desarrolladores no se han molestado en dedicarles un poco de tiempo para modificarlas de modo que pueden sacar provecho de las ventajas de la nueva resolución de pantalla. La nueva versión del iPhone SDK con esta función y el simulador de iPad sale hoy mismo así que… ¡a por ella chicos! Un detalle, el sistema operativo ofrecerá soporte (también con diccionario) para nueve idiomas entre los que afortunadamente se encuentra el español (además del inglés, francés, alemán, japonés, neerlandés, italiano, chino y ruso).

Mail y Notas son el mejor ejemplo de los cambios que podemos esperar de la mayoría de aplicaciones: al disponer de una pantalla más grande, la aplicación se ejecuta en un modo de dos columnas con menús desplegables y un enorme teclado virtual que seguro facilitará las cosas a la hora de trabajar con él como si se tratase de uno real.

Safari es básicamente un cruce entre la versión de escritorio y la del iPhone, solo que desgraciadamente parece arrastrar (al menos en la presentación) las mismas carencias de este último: ¿queríais soporte Flash? Pues parece que de momento nada de nada.

iCal y Agenda muestran diferencias más drásticas en cuanto a su diseño, mucho más original y divertido que hace que parezcan más una auténtica agenda que una aplicación en si.

Maps ofrece una experiencia más fluida y satisfactoria que en su versión móvil y hasta podemos acceder a la vista Street View funcionando todo de un modo realmente suave.

Como era de esperar, la App Store y iTunes también tienen su espacio en el iPad ofreciendo poco más que lo que ya conocemos solo que más bonito y a mayor tamaño.

El iPad también es un iPod ya que cuenta con las mismas capacidades para reproducir música y vídeos que sus hermanos pequeños solo que a través de una interfaz que recuerda más a iTunes de Mac que a otra cosa. Además, la potencia adicional del procesador Apple A4 permite reproducir sin problemas vídeos h.264 de hasta 720p y 30 fps.

iPhoto, uno de mis preferidos. Al más puro estilo de su hermano mayor, la aplicación de visualización de imágenes del iPad cuenta con un diseño fantástico y todas las funciones que cabría esperar, incluyendo álbumes, eventos, caras y lugares.

iBooks, la aplicación que convierte el iPad en un lector de libros electrónicos (a falta de tinta electrónica) realizada por la propia Apple. Su diseño emula a un libro en si sobre el que podemos interactuar pulsando sobre cualquier esquina para pasar de página o deslizarla con el dedo, cambiar el tamaño del texto, saltar directamente a otro capítulo desde el sumario, etc. Lo mejor de todo es que utiliza ePub, el formato estándar en lectores de libros electrónicos (la mayoría salvo el Kindle) por lo que puede que seamos capaces de importar nuestros propios libros además de los que adquiramos en la nueva tienda de Apple, la iBookstore, en la que encontraremos (al menos en los EE.UU.) buena parte del catálogo de las editoriales Penguin, Harper Collins, Simon & Schuster, Macmillan y Hachette.

Entre los juegos mostrados merece la pena destacar el shooter en primera persona Nova de Gameloft, una versión con controles y gráficos mejorados respecto a su equivalente de iPhone, y Need for Speed Shift de Electronic Arts, definitivamente mejor que cualquier juego de iPhone aunque aún sin acercarse a lo que ofrece hoy día un portátil en lo que a gráficos se refiere. Eso sí, en ambos casos queda patente las ventajas de contar con una pantalla de mayor tamaño en la que, aunque seguimos careciendo de controles reales, al menos podemos utilizar los joystick virtuales sin que nuestros dedos tapen la mayor parte de la imagen. Además, se abre la puerta a una mayor interacción gracias a los nuevos gestos como deslizar tres dedos por la pantalla para abrir una puerta en el caso de Nova.

Dos aplicaciones ajenas a Apple que han destacado son Brushes, una aplicación de dibujo artístico con soporte de capas, pinceles, zoom de hasta 32x y que además es capaz de reproducir el proceso de realización de nuestras obras, y la aplicación del New York Times, muy similar a un periódico real solo que aquí puedes modificar el número de columnas, ampliar el texto o verlo en modo apaisado. Seguro que será imitada por más de un periódico nacional.

Y lo mejor para el final: iWork con versiones realizadas expresamente para el iPad de Pages, Keynote y Numbers. Simple y llanamente, se trata una versión de nuestro paquete ofimático preferido rediseñada para adaptarse a la perfección a una interfaz multitáctil, siendo con mucho, la aplicación más completa y robusta que hemos visto hasta ahora. En este caso, estamos más cerca del tipo de aplicaciones que podemos esperar de un Mac que de las de un iPhone y cada una tendrá un precio de 9,99 dólares.

Conectividad

Como ya hemos dicho, además del modelo básico se comercializará un segundo modelo con 3G para el que existirán contratos diseñados exclusivamente para él de un modo similar a lo que ocurre con el iPhone. Así, en los EE.UU. AT&T ofrecerá dos tipos de contrato prepago: uno de 250MB por 14,99 dólares para usuarios que tan solo busquen descargar el correo y ver alguna página web y otro sin límite de descarga por 29,99 dólares mensuales. Steve Jobs ha puesto un especial énfasis en que no existirá ningún contrato de permanencia, pudiendo cancelarlo en el momento que queramos.

Independientemente del país en el que nos encontremos, el iPad 3G se venderá desbloqueado sin excepción y aunque Apple intentará llegar a acuerdos especiales con las diferentes compañías con las que trabaja siempre podremos utilizar la que nosotros prefiramos.

Accesorios

Apple no ha esperado a que otros fabricantes se pongan las pilas y hagan el agosto vendiendo accesorios para el iPad. ¿Queréis una funda? Tenemos el iPad Case, que no solo protege nuestro tablet sino que también nos permite colocarlo en diferentes posiciones de un modo cómodo y sencillo. ¿Buscáis la comodidad de un teclado físico? Pues no, no podréis utilizar (al menos no de momento) vuestro recién actualizado teclado inalámbrico pero al menos tenéis una alternativa, el iPad Keyboard Dock, básicamente una fusión entre el teclado de Apple y una versión más equilibrada del clásico Dock. ¿Aún os queda dinero en la tarjeta? Pues nada, el iPad Dock sin teclado, el iPad Camera Connection Kit para importar fotos conectándola mediante USB o descargándolas directamente mediante su versión con lector de tarjetas SD o el iPad USB Power Adapter para cargarlo directamente de la red eléctrica harán el resto.

Precio y disponibilidad

Cada modelo del iPad estará disponible con capacidades de 16, 32 y 64 GB por 499, 599 y 699 dólares para el modelo con conectividad WiFi y 629, 729 y 829 dólares para el modelo con WiFi y 3G. La versión básica con WiFi estará disponible de forma internacional antes de lo que esperábamos: en tan solo 60 días, mientras que el modelo 3G se retrasará un mes más, probablemente por las diferentes pruebas a las que se someten este tipo de dispositivos para asegurarse de que cumplen con las normativas de los distintos países.

miércoles, 17 de febrero de 2010


Google arremete contra la muralla china


14 de enero de 2010
The Wall Street Journal
Su amenaza de retirarse del país refleja el descontento de las firmas extranjeras por el clima empresarial.

Por Ian Johnson y Jason Dean

.BEIJING—La amenaza de Google de retirarse de China debido a problemas de censura y ciberespionaje es una señal de una creciente predisposición entre las empresas y los gobiernos de otros países a superar la convención que ha definido décadas de relación entre Occidente y el gigante asiático: China es tan grande que no queda otra alternativa que adaptarse.

Pese a que no es probable que la iniciativa del gigante de Internet estadounidense sea emulada por otras grandes empresas extranjeras, su sorprendente desafío alimentará sin dudas el debate sobre las relaciones comerciales con China. Durante años, las empresas occidentales aceptaron que los negocios se hacen de otra forma en China y se sometieron a una interferencia estatal que no hubieran tolerado en otros lugares, desde límites a la libertad de expresión al establecimiento de células del Partido Comunista.

Todo esto ha sido impulsado por la importancia de China, que crece a toda velocidad. Se trata del mayor mercado para toda clase de bienes, desde teléfonos celulares a varias materias primas. China superó a EE.UU. el año pasado como el mayor mercado de automóviles y acaba de desplazar a Alemania como el mayor exportador mundial y se encamina a superar a Japón este año como la segunda economía del planeta después de EE.UU.

El anuncio de Google de que podría retirarse de China arrancó aplausos, advertencias y ramos de flores de disidentes y activistas de Internet.

.Sin embargo, tal como demuestra la decisión de Google, el ascenso de China viene acompañado de una tensión cada vez más grande en el resto del mundo respecto a políticas y prácticas que desafían normas internacionales y que muchos en Occidente consideran difíciles de digerir. En el frente económico, Beijing ha frustrado a muchos socios comerciales al mantener muy baja la cotización del yuan y subsidiar sus exportaciones, políticas que perjudican a otros países al hacer que los productos chinos sean artificialmente baratos.

Políticamente, los países han estado alienados por una sucesión de temas de derechos humanos, como el arresto de un ejecutivo minero australiano que estuvo incomunicado durante siete meses. El país también ha sido blanco de críticas medioambientales. Los diplomáticos extranjeros han dado el inusual paso de sugerir que China aguó el reciente acuerdo de Copenhague.

Google dijo el martes que evaluará si se retira del país luego de que piratas informáticos chinos violaran su seguridad, y la de muchas otras empresas extranjeras en una variedad de sectores, como finanzas, tecnología, medios y químicos. Google afirmó que estaba contactando a las empresas involucradas pero hasta ahora no se divulgaron nombres.

Relaciones en deterioro

El síndrome de Google culmina una serie de crecientes quejas de empresas foráneas acerca del deterioro del clima empresarial en China. Tanto la Cámara de Comercio Europea como la de EE.UU. en China emitieron informes con duras críticas al entorno de negocios en el país. Durante los años 80 y 90 las compañías extranjeras eran cortejadas con insistencia por los líderes chinos, lo que se tradujo en la importación de tecnología, capacitación y mejores prácticas internacionales a China. En los últimos años, sin embargo, las firmas foráneas se han quejado de que el tono oficial ya no es tan amistoso.

Incluso en el mundo empresarial, donde los conflictos abiertos con el gobierno son muy raros ya que las compañías temen desatar la ira de los reguladores, el año pasado hubo dos grandes enfrentamientos entre las autoridades y las empresas extranjeras.

Cuando en junio el gobierno chino trató de obligar a los fabricantes de computadoras a incluir software de filtración en la Web conocido como "Green Dam" en todas las nuevas PC en China, asociaciones de empresas que representan a numerosas compañías de tecnología criticaron la iniciativa públicamente y les pidieron a las autoridades chinas que recapacitaran. La medida quedó postergada indefinidamente.

También el año pasado, un grupo similar de empresas manifestó su rechazo —otra vez en público— a reglas del gobierno que establecían que agencias estatales debían comprar productos de tecnología de propiedad intelectual local. Las compañías afirmaron que la medida era discriminatoria y proteccionista. El tema sigue sin resolverse.

Algunos analistas advierten, sin embargo, que los problemas de Google con China también podrían estar más directamente conectados a intereses comerciales. Google cuenta con una participación de mercado de 35% en el país, una cifra que crece pero cuya rentabilidad es cuestionable, indica Tom Doctoroff, director general de J. Walter Thomson. Los usuarios chinos no hacen muchas compras en Internet, lo que mina la posibilidad de que compañías como Google generen ingresos.

Además, Google tendría menos problemas para salir de China que otras compañías. Pese a que su negocio está en crecimiento, se estima que representa apenas unos puntos porcentuales de sus ingresos totales. Eso supone un gran contraste frente a fabricantes como General Motors Corp., para la cual China es un mercado crucial.

Ting-I Tsai en Taipei y Loretta Chao, en Beijing, contribuyeron a este artículo.

sábado, 6 de febrero de 2010


Crecen robos vía Internet en un 30%

Perú 21
06 de febrero de 2010
En la medida que avanza la tecnología, los criminales desarrollan nuevas formas de hurto para burlar los sistemas de seguridad.

En 2009 se han reportado 480 casos de robos vía Internet.

Por Rudy Palma

Caso 1 En enero se detectaron varias cadenas de correos bajo el título “Feliz Navidad’, “Nueva Postal de Amor’, “Shakira al borde la muerte’ y hasta links a supuestos videos eróticos, invitando al usuario a abrir un enlace. Al hacerlo se instalaba en la PC un programa malintencionado.

Así, cuando el usuario entraba a la página web de su banco, inmediatamente se abría una web falsa, muy similar a la original, que capturaba las cuentas y claves de la víctima para robarle sus fondos.

Consejo: Ignore las cadenas de correos y no descargue programas, cuyo origen desconoce. También, mantenga actualizado su antivirus.

Caso 2 Un email fue enviado a varios clientes de un conocido banco. En este se solicitaba ingresar a un link (supuestamente la web del banco) para que el usuario actualice sus datos.

Consejo: Los bancos no envían links a sus clientes para que ingresen a otra web ni mucho menos piden las claves por correo electrónico. Los bancos suelen personalizar los mensajes, es decir, consignan el nombre del cliente.

DENÚNCIELOS. Según las cifras de la Policía Informática, en 2009 se reportaron unos 483 casos de estafa por Internet, lo que representó un incremento cercano al 30% respecto del año anterior. Sin embargo, esta cifra no representaría ni la décima parte del total de estafas, la mayoría reclama ante el banco y no presenta una denuncia policial.

El público debe saber que, así como avanza la tecnología, las modalidades de estafa virtual se actualizan y se vuelven mucho más complejas. Moisés de La Piedra, jefe de Postgrado del Instituto de Formación Bancaria (IFB), advirtió que, así como los bancos buscan mejorar sus sistemas de seguridad, los criminales avanzan en sus conocimientos tecnológicos para burlarlos.

“Es obligación de los usuarios revisar las medidas de seguridad de web de su banco. Pero, la entidad tiene la responsabilidad de instruir y difundir las medidas de protección”, alertó.

LUEGO DEL ROBO. ¿Qué debe hacer si ha sido víctima de un robo de su cuentan bancaria por Internet? El especialista afirma que el afectado debe recabar la evidencia del hurto y llamar o ir inmediatamente a su banco. El banco procederá a bloquear la cuenta y las claves vinculadas. Esta acción no exime al cliente a hacer la denuncia ante la División de Investigación de Delitos de Alta Tecnología (Divindat).

lunes, 1 de febrero de 2010


Google nos espía


La República
31 de enero de 2010


Es la empresa más exitosa de internet de la última década, pero para sus detractores se ha convertido en “una potencia mundial sin control”. El libro “El engaño Google” –traducido recientemente al español– advierte de su creciente dominio en la presente y futura sociedad de la información.

Por Raúl Mendoza

Gracias a su buscador, el mejor equipado y más usado de internet, Google se ha convertido en el Tiranosaurio Rex del ciberespacio. Esta frase ingeniosa, acuñada por sus detractores, alude al gigantesco, aplastante y omnívoro poder que la empresa ha logrado a través de los servicios que ofrece. Hoy, de los aproximadamente 1,300 millones de internautas que hay en la red, más de la mitad utiliza Google para sus búsquedas. Pero su dadivosidad –según sus críticos– viene con trampa: es el mayor recopilador de datos de usuarios en el planeta y le da a esa información usos comerciales en los que pocos reparan.

El libro “El engaño Google” del periodista austriaco Gerald Reischl describe con detalle el dominio alcanzado por Google gracias a su hasta hoy insuperable motor de búsqueda. Este le ha dado un orden al caos y saturamiento del ciberespacio. Google, además, tiene aplicaciones que complementan lo que ofrece, como Google Earth, Google Maps, Gmail y otros. Todas con acceso gratuito. Precisamente esto explica el título de su libro: la empresa norteamericana “regala” sus muchos servicios sin cobrar, a cambio del acceso irrestricto a nuestra privacidad. En ese sentido, para Reischl, Google se aprovecha del usuario.

Google te googlea

A diferencia de Facebook, donde los usuarios introducen información personal conscientemente, Google recopila datos sin pedirnos permiso. Desde nuestra identidad hasta nuestros hábitos, intereses y proyecciones. “A partir de la dirección IP es posible averiguar la situación geográfica del internauta (…) y a partir de los clicks también se puede reconocer el navegador y el historial, es decir qué páginas ha visitado y qué marcadores ha fijado”, dice el libro. Reischl va más allá: señala que Google sabe a qué horas un navegante accede a determinadas páginas y asegura que prácticamente tiene un expediente de cada usuario con datos de todo tipo.

Este conocimiento se profundiza si por ejemplo uno tiene una cuenta de Gmail, el correo de Google. Así personalizan mejor al usuario. Además la empresa escanea todos los correos que entran o salen de la bandeja bajo el pretexto de contrarrestar los virus. Y si uno usa Google Docs o el disco duro GDrive, toda la información que el usuario guarda en estos, muchas veces muy íntima y confidencial, con seguridad pasa a los archivadores de datos de la empresa. Oficialmente el tiempo de almacenamiento de cada dato es de 18 meses, pero es poco probable que desaparezcan tras ese lapso.

Con la información recogida Google crea ‘perfiles del usuario’ y ha desarrollado un ‘sistema de recomendaciones’. Con este sistema envía información publicitaria personalizada, puede poner banners ‘de interés’ para el internauta y cobrar dinero a empresas que pagan porque su publicidad llega a su público objetivo. Acerca de su singular motor de búsqueda han surgido fundadas reticencias: sus detractores señalan que la empresa puede priorizar algunas páginas sobre otras y que justamente lo haría con portales de mucha publicidad. Google asegura que su motor de búsqueda decide –según un algoritmo– qué páginas aparecen tras una búsqueda.

Se estima que Google gana 17 mil millones de dólares anuales en publicidad. Su buscador no solo muestra los resultados de miles de páginas, también presenta ‘enlaces relacionados’, que terminan siendo publicidad indirecta. Cada click de un usuario en ellos le permite ganar dinero, en lo que se conoce como sistema Ad Word. Puede cobrar entre 1 y 90 dólares, según el anunciante.

Pongamos un ejemplo norteamericano. Los bufetes de abogados pagan por si alguien hace click sobre el enlace “mesotelioma”.

¿Por qué? Se trata de un cáncer provocado por el asbesto. Quien digite esta palabra en Google probablemente tenga este mal y el buscador lo llevará automáticamente a la página web de un bufete de abogados. Estos podrían ganar hasta un millón de dólares en un juicio contra alguna empresa, así que no les molesta pagar 90 dólares.

Pero si bien su buscador le ha permitido a Google hacerse de un banco de datos insuperable para enviar publicidad dirigida, no se conforma con eso. Hoy pretende incursionar en el mercado off-line con su sistema Ad Spots, con el cual hará publicidad multimedia en los medios de comunicación on-line, en la prensa, la radio y la televisión. La publicidad será igual que en la Red: adaptada al perfil de cada consumidor. Los publicistas ya empiezan a mirar con malos ojos al gigante: saben que allí donde incursiona, se impone. La información exclusiva –que tiene– es poder. Con esa impresionante base de datos Google es capaz de establecer cuál será el tipo de publicidad más exitosa en un determinado barrio o grupo de edificios.

Eso es a mediano plazo. Pero ya trabaja en ello. Su división Ad Spots tiene 1,000 empleados trabajando en el proyecto. Después incursionará en las vallas publicitarias. Y más adelante lo hará en la IPTV, la televisión que llegará a través del mismo cable de internet. Según su método, no brindarán una tanda publicitaria única para un país o región, sino una específica según zonas. “Con ello evita la dispersión del televidente porque, por ejemplo, un veinteañero a lo mejor no se interese por un anuncio de pañales, pero sí por uno de coches, y una mujer de 50 años, comprará antes un billete para un crucero que un automóvil”, dice Reischl en su libro.

Un paso clave del gigante ha sido ingresar al negocio de las telecomunicaciones. Tienen bajo la mira a los 3,300 millones de personas que hoy poseen un celular, la mitad de la población mundial. Pensando en ellos acaban de lanzar el Nexus One, un teléfono que funciona con su sistema operativo Android. También proyectan incursionar en los sistemas operativos, poner publicidad por SMS e incluso spots en la pantalla del teléfono. En el futuro podrían ofrecer un celular gratis, pagado por la publicidad. Pero hay más: son socios del proyecto de cable submarino Unity que asegura el ancho de banda para los próximos veinte años en Estados Unidos y otros países. Google actuará como proveedor de redes a compañías de telecomunicaciones e internet. Es decir, seguirá creciendo. Y su gran tesoro es todo lo que sabe sobre los usuarios. “Google se ha convertido en un ‘Gran Hermano’ cuya mirada pronto llegará a los lugares más recónditos de nuestra vida privada”, advierte el libro.

Datos

17 mil millones de dólares ingresa Google anualmente por publicidad. De ellos, 4 mil son ganancia neta.

450 mil servidores tiene desperdigados Google por todo el mundo para hacer posibles los servicios que brinda.

750 millones de euros tiene previsto invertir en un megaproyecto en India para protegerse contra posibles ciberataques en el futuro.

Poder y control

¿Cómo funciona la red Google? “El sistema se compone de una red de decenas de miles de servidores diseminados por los cinco continentes”, explica el libro. Distintas estimaciones sitúan el número de estos servidores en alrededor de 450 mil, más del doble que Microsoft. Con ello su red informática es la mayor y más potente del mundo, lo que hace posible todos los servicios que brinda. ¿Cómo evitar que Google lo sepa todo? Hay numerosos buscadores alternativos en la red y sistemas de búsquedas anónimos y gratuitos (hay que tener cierta experiencia como cibernauta), o programas que aseguran el anonimato previo pago.

Para Reischl, el futuro no es todavía de Google –hay zonas donde otros buscadores son más populares– y a lo mejor pueda ser desplazado de su lugar de predominio tal como ocurrió con IBM primero, Microsoft después y Yahoo posteriormente. Quizá Google pueda ser relegado por Facebook en unos años o por algún nuevo invento tecnológico.